Coordinación y seguimiento de la dinamizaicón comunitaria y participación ciudadana en el proyecto Comunidades Circulares
Comunidades Circulares de Compostaje Comunitario es un proyecto piloto puesto en marcha por el Cabildo Insular de Tenerife a través de su Área de Desarrollo Sostenible y Lucha contra el Cambio Climático. Con su implementación se pretenden poner en práctica alternativas más sostenibles en relación a la gestión de biorresiduos, a través del compostaje comunitario, implantando 19 zonas de compostaje repartidas entre los municipios de La Laguna, El Rosario, Tacoronte, Tegueste y La Universidad de La Laguna. A través de ellas, y como objetivo más destacado, se quiere estudiar el funcionamiento y posibilidades del compostaje comunitario de diferentes flujos de biorresiduos, recabando datos reales sobre el modelo de compostaje local y descentralizado a escala comunitaria en la isla de Tenerife.
En el marco de esta actuación, y debido a la necesidad de tener un servicio de coordinación y seguimiento de las dinamizaciones locales, que deben ser contratadas por cada una de las administraciones implicadas, el Cabildo de Tenerife ha contado con los servicios profesionales de Teyra S. Coop., con el fin de diseñar y coordinar las metodologías de dinamización comunitaria a implementar en los diferentes ámbitos de las zonas de compostaje, así como coordinar, supervisar y dar seguimiento a dicha dinamización comunitaria con todos los equipos y agentes institucionales y sociales implicados.
Así, desde Teyra, entre otras cuestiones, se elaboró una hoja de ruta común para la implantación y dinamización de las distintas zonas, así como se diseñaron y se pusieron en funcionamiento las herramientas necesarias de seguimiento y coordinación, con el fin de unificar y protocolizar las distintas actuaciones, que si bien, en cada zona debían tener un “aterrizaje” a los distintos contextos locales e incluso de cada una de ellas, se pretendía que tuviesen un “marco común” de actuación que homogenizara y facilitara las tareas a los distintos equipos incorporados a la dinamización local.
Transcurrido algo menos de un año de implementación del proyecto, se han sumado un aproximado de 950 personas, y a través de sus aportaciones, han logrado que el proyecto recoja en torno a 16 toneladas de materia orgánica, transformadas en compost de alta calidad.
De este modo, y con la complejidad añadida de un proyecto piloto en el que son partícipes multitud de agentes, tanto a nivel institucional como desarrollando diferentes servicios, se han podido ir abriendo a distintos ritmos las zonas situadas en todos los municipios participantes así como en la Universidad de La Laguna. De este modo, y transcurrido algo menos de un año de implementación del proyecto, 312 hogares se han sumado a la iniciativa, lo cuál supone un aproximado de 950 personas, y que, a través de sus aportaciones, han logrado que el proyecto recoja en torno a 16 toneladas de materia orgánica, que ha dejado de ser transportada hasta el municipio de Arico para ser enterrada junto a la fracción resto, y revalorizándola, dejándola en sus municipios de origen, siendo tratada localmente, y logrando convertir un residuo en un recurso muy valioso, ya que el compost obtenido y analizado, ha sido de alta calidad y ha vuelto al suelo a través de las propias participantes, ya que es repartido entre todas ellas.
Debido al éxito y las cifras que se han ido obteniendo con esta primera fase del pilotaje, desde el Cabildo Insular de Tenerife se ha hecho extensiva la invitación a aquellos municipios que quieran adherirse a la iniciativa, logrando una muy buena acogida por parte de varios de ellos y que, probablemente muy pronto, se sumen a la misma.